23/04/2016

Un virus con nombre y apellido


Un Banfield chato, sin ideas claras y sin siquiera intentar ir al frente con un hombre de mas cayó nuevamente 0-2 en el Clásico del Sur. Tal como dice el título, este presente del equipo lleva nombre y apellido pero yo lo dejaré a disposición de ustedes para que saquen sus conclusiones.

Nada que decir. Ni teniendo un hombre de mas se le cayó una idea al equipo, ni con el penal atajado por Hilario Navarro a José Sand, ninguno de estos momentos sirvió para que Banfield vaya a buscar el partido.

Desde el comienzo se vió claramente lo que fue a hacer Banfield a "La Fortaleza", la idea principal de Falcioni fue ir a buscarlo de contra. Cosa que no pudo hacer tras la expulsión de Iván Marcone, lo cual llevó a que Lanús tenga que esperar a Banfield atrás, esperando una posible contra. Esta expulsión pareció reforzar mas el ánimo a Lanús que al mismo Banfield que no supo que hacer con ese hombre extra que poseía dentro del campo de juego.

Sobre el final del primer tiempo con un hombre menos Lanús consigue llevarse un penal. José Sand es quien va a patear. Correntino vs. correntino. El duelo es ganado por el arquero del "Taladro" quien mantenía hasta entonces el 0 en su arco. Y así finalizaba el primer tiempo.

El segundo tiempo el equipo sorpresivamente fue a jugar exactamente de la misma forma que jugó el primero, es decir, de la manera que no debía salir a jugarlo. Aproximadamente a los 15 minutos, el capitán Walter Erviti se hace expulsar metiendo una mano infantil, dejando con 10 a su equipo y a Lanús con mas chances de ganarlo. Tras la expulsión, Lanús juega el tiro libre, el paraguayo Ayala toma la pelota y literalmente "le rompe el arco" a Navarro marcando un impactante golazo.

Es aquí donde Banfield terminó de decaer. Desesperado pero sin ideas, los de Falcioni fueron a buscar el partido obviamente sin conseguir nada. En el final del partido, Banfield poseía un tiro libre a favor, un tiro libre peligroso, que finalmente fue mas peligroso para Banfield que para Lanús. Los "granates" roban la pelota, se lanzan a la contra que culmina con la gran definición del paraguayo Miguel Almirón que marca el 0-2 final.

Banfield está enfermo, esta enfermedad tiene nombre y apellido. Este presente no es culpa de los Dt's ni de los jugadores, el virus se encuentra en otro lado, tiene un nombre propio y todos los hinchas de Banfield sabemos cuál es.

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